¿Podemos ser optimistas?
Esa es la cuestión, ¿podemos serlo? Teniendo en cuenta los antecedentes de 11 temporadas consecutivas de fracasos y decepciones se hace harto complicado poder levantar la cabeza y decir sin disímulo: ¡Sí, este año lucharemos por los títulos! Deportivamente estamos ahí, en la pómada, como ya ocurriera con Sacchi, con Manzano o incluso la anterior temporada con Aguirre, sin embargo aquellas temporadas todo se vino al traste demasiado pronto. Entonces, ¿qué ha cambiado esta temporada? Institucionalmente poco y mucho a la vez, es decir, siguen los mismos golfos de siempre en el palco, pero el Calderón será derruido (salvo sorpresa mayúscula)dentro de unos años. Deportivamente, con respecto a temporadas anteriores, también se ha variado. Ya no está nuestro eterno capitán Fernando Torres, pero tenemos, a tenor del trampo de temporada transcurrido un nivel atacante superior al de otros años, en los que Torres era un islote de calidad dentro de un archipiélago de mediocridades. Sin embargo, el equipo, tampoco muestra una solidez ni en juego ni en resultados como para pensar que este año, aunque sólo sea esta temporada, veremos al Atleti de siempre, ese Atleti que ganaba títulos o luchaba por ellos hasta el final. Quizás la clasificación para la Champions (mínimo exigible para nuestro equipo) se pueda al fín conseguir, paso importante sin duda, pero que se debió lograr dos temporadas después del ascenso.
1 comentario:
Sí, podemos ser optimistas pero no es ningún mérito de la directiva sino de los 80 millones de euros en fichajes. Invertidos decentemente y que, por otra parte, no tenemos.
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