miércoles, septiembre 20, 2006

HISTORIA: Capítulo 1: COMIENZO DE LA DEBACLE. Gil llega a la presidencia: El Huracán llega al Manzanares


El 26 de Junio de 1987 se producen las elecciones a la presidencia del Atlético de Madrid. Cuatro son los candidatos y el censo electoral queda fijado en 22.274 socios rojiblancos con derecho a voto. La bomba electoral apareció bajo el brazo de Jesús Gil. A última hora de ese día se produjo la llegada a Madrid del luso Paolo Futre, gran estrella en el Oporto, que se acababa de proclamar campeón de Europa. Gil lo presenta con gran expectación en los medios de información como su gran baza y de esta manera consigue el triunfo en las elecciones y se convierte en el nuevo presidente del club.

El nuevo presidente superó a Enrique Sánchez de León, Agustín Cotorruelo, y Salvador Santos Campano. Jesús Gil, soriano de nacimiento y aficionado cuando era niño del Athletic de Bilbao tenía el carnet de socio número 16.386 y había sido durante cinco meses directivo con el fallecido Vicente Calderón.

Jesús Gil se hace cargo del club tras la finalización del encuentro de la final de la Copa de S.M el Rey. El Atleti perdió aquella final contra la Real Sociedad en La Romareda, parece que Gil no trajo suerte a la plantilla.

Una de sus primeras actuaciones fue arengar a sus jugadores y cuerpo técnico tras la derrota en Zaragoza: “Dentro del equipo sólo quiero ganadores y me gustaría saber quiénes son los jugadores de la plantilla que no tienen ese carácter porque nos sobran”. Luis Aragonés técnico del club aquel año responde al presidente preguntándole si iba a continuar en el club ya que terminaba contrato.
A Gil la respuesta del Sabio de Hortaleza no le gusta y le responde de forma vehemente. Presidente y técnico se enzarzan en una discusión muy subida de tono que está a punto de llegar a la agresión física. A raíz de este triste suceso las declaraciones de Jesús Gil demuestran a las claras como será su mandato. Declaraciones siempre subidas de tono, descalifica duramente a unos y ensalza a otros que poco después también serán objeto de sus iras.

Ese año Luis Aragonés no es renovado y se firma a César Luis Menotti. Los fichajes son los siguientes: Goikoetxea (Athletic), Eusebio(Valladolid), y Marcos(Barcelona). El Huracán Gil continúa y el lema “Si no estás conmigo estás contra mí” es su forma de actuar como presidente del club. Una parte de la afición está encantada con el carácter de Gil, otra sin embargo no comulga con las formas del máximo mandatario rojiblanco. El proyecto de Menotti y su fútbol espectáculo no dio resultado, parece ser que el técnico argentino era(diciéndolo de manera pudorosa) poco trabajador. Eso sí, los mimbres para crear un conjunto ganador eran los que eran. La temporada y la expectación creada con la llegada de Menotti pronto se verá truncada tras la floja pretemporada del equipo y el comienzo de la liga. Eso sí, Bernabéu y Camp Nou fueron conquistados con sendas goleadas. Eran otros tiempos para el Atleti. No obstante, estas victorias ante los grandes fueron un espejismo, el equipo no funcionaba como los aficionados deseaban y tras una serie de malos resultados, el presidente realiza una serie de declaraciones incendiarias atacando a todo aquello que tenía delante: plantilla, entrenador, federación y colectivo arbitral. Su forofismo exacerbado gusta a buena parte de la afición pero como es lógico le crea enemistades con diversas personalidades que en los tiempos venideros le pasarán factura.

En Marzo de 1988 Gil cesa a su primer técnico. Los métodos de Menotti no cuajaron en el Atleti y Gil encontró, como fue su costumbre, al máximo culpable de la situación. Con anterioridad el Dr. Ibáñez denunció el pésimo estado físico de la plantilla colchonera.
El sustituto de Menotti fue José Armando Ufarte, ex jugador rojiblanco y en aquellos tiempos responsable de la cantera. Sin embargo el presidente colchonero tiene en mente a Maguregui. Gil, llega a un acuerdo con el técnico vasco pero su vinculación al club no se haría efectiva hasta la próxima temporada. Ufarte, es también cesado por diferencias con Gil sólo un mes después de haber llegado al cargo. Su sustituto para el final de la campaña es el desconocido Antonio Briones. El equipo finalmente acaba tercero en liga a 14 puntos del Real Madrid y eliminado en los cuartos de final de la Copa ante la Real Sociedad. El primer proyecto de Jesús Gil fue un verdadero fracaso, especialmente después de las expectativas que marcó el equipo al principio de campaña. Sin embargo lo peor no fueron los resultados deportivos, o los cambios de entrenador. El enfrentamiento con los miembros del vestuario fue lo que más daño le hizo al club en el primer año de Jesús Gil. Tal es así que la mayoría de los jugadores de la primera plantilla realizan un comunicado en el que hay varios puntos:
1.Quejas sobre el repentino cese de Ufarte.
2. Apoyo de la plantilla al jugador Enrique Setién.
3. Mostrar su total desaprobación ante las descalificaciones e insultos del presidente del club.


Todos los jugadores salvo Tomás Reñones firmaron la nota. Los impulsores del comunicado fueron descubiertos por Gil que engrosaría su lista negra con nombres como Arteche, Goiko, Quique Ramos y Quique Setién.

El primer proyecto de Jesús Gil acabó en fracaso tanto deportivo como institucional. Varios directivos se alejaban de sus postulados al considerarlos dictatoriales e impropias de un club como el madrileño.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Del gordo cabron todos sabemos lo cerdo que es pero la pseudoprensa madridista lo ayuda